Plasmar una historia utilizando imágenes y sonidos es una de las maravillas posibles gracias a la tecnología. No soy ni pretendo ser experto en cine: la mayoría de los aspectos técnicos sobrepasan mi entendimiento actual como para poder apreciarlos o criticarlos, pero indudablemente disfruto mucho una historia entretenida y bien contada.
Quisiera inaugurar esta sección hablando de una de las películas que más me han conmovido recientemente. Se llama “The Normal Heart”, y está basada en la obra de teatro del mismo nombre escrita por un tal Larry Kramer en 1985. La película fue realizada para la televisión, en 2014. Yo la vi durante un vuelo, esa es la única manera de ver contenido de HBO sin contar con paquetes premium de televisión por cable.
La historia está basada en el inicio de la pandemia de VIH-SIDA en Nueva York a principios de los 90s. Mark Ruffalo interpreta a Ned Weeks, un periodista homosexual que observa impotente cómo uno a uno de sus amigos caen víctimas de enfermedades poco frecuentes pero extremadamente letales en personas con inmunodeficiencias (“defensas bajas”), algo que tenían en común todos ellos. Como muchos lo sabemos, inicialmente la infección por VIH-SIDA se observó en varones homosexuales, haitianos, hemofílicos y heroinómanos (las “4H”). En especial al primer grupo, al parecer a nadie le importaba ayudar; más aún, a no poca gente le daba gusto que esta especie de “justicia divina” afectara a tan vilipendiado grupo, por lo que Weeks se da a la tarea de buscar apoyo financiero y mediático para concientizar a la gente y a los poderosos de NY para combatir esta incipiente crisis sanitaria de la que nadie en ese momento se imaginaría en lo que terminaría evolucionando.
Además de Ruffalo, esta película cuenta con las actuaciones de Julia Roberts, el abiertamente gay Jim Parsons (sí, Sheldon Cooper) y Alfred Molina entre otros intérpretes menos conocidos. Esta película me hizo imaginar la desesperación, la frustración y el enojo que seguramente sintieron miles de personas durante las décadas de los 80s-90s al ver a sus familiares, parejas y amigos sucumbir de manera irremediable ante esta ahora controlable enfermedad. Para mi, supera incluso a Philadelphia en este aspecto. Claro, debe señalarse que tiene una gran carga autobiográfica.
Para quienes les guste el teatro, la obra Un Corazón Normal estará presentándose el día de hoy en el Teatro Galerías de Guadalajara.